Desde hace varias semanas, casi meses, los domingos preparo dos piezas de pan, una barra de molde, que congelo en rebanadas y otra más pequeña, para comer recién hecha en el día. Con la segunda, me gusta probar diferentes formas y esta vez he modelado una anguila. Aunque ha salido con cara de señor gordito y bonachón.
Ingredientes
500 g de harina de trigo integral
200 g. de harina de fuerza
350 ml de agua templada
10 g de azúcar
10 g de sal
2 cucharadas de aceite de oliva
1 paquete de levadura fresca
2 clavos de olor
Desmenuzar la levadura en un poco de agua templada con el azúcar y esperar hasta que esponje. Mientras poner la harina en un cuenco, echar la mezcla de levadura y hacer una masa blanda con la harina de los bordes y dejar reposar unos quince minutos, añadir el resto de los ingredientes y amasar. Dejar en sitio templado hasta que doble el volumen.
Tomar una porción de unos 400 g para hacer un cordón largo que se enrolla formando la anguila, con unas tijeras, se le hacen unos cortes para formar la boca, los ojos y las escamas. En los ojos se ponen los clavos de olor.
Cubrir con un paño limpio y dejar en sitio templado hasta que suba el doble.
Cocer en el horno precalentado a 220º durante unos 30 minutos, hasta que se dore.
Enfriar sobre una rejilla.
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