En esta ocasión he utilizado crema de limón para el relleno de estos hojaldres. Lo clásico es hacerlo con crema pastelera, así es como los venden en las pastelerías. Aquí en Granada se llaman barquillos. Mi madre, que los hacía buenísimos, los llamaba tirabuzones y así los llamo yo .
Ingredientes
200 g de recortes de hojaldre
Crema de limón
1 limón
1 huevo
6 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de maizena
12 cucharadas de agua
Poner a hervir el agua con el azúcar y la ralladura del limón. Mezclar la maizena con el zumo y el huevo batido, echar el agua hirviendo sobre esta mezcla, se cuela y se pone otra vez al fuego moviendo sin parar hasta que espese. Pasar a un cuenco, tapar con plástico transparente y dejar enfriar.
Estirar el hojaldre muy fino, cortar tiras y enrollar en los conos metálicos. Poner en una bandeja cubierta con papel vegeta con la unión hacia abajo. Cocer en el horno precalentado a 200º hasta que se doren.
Dejar enfriar sobre una rejilla y sacar el molde. Para que me resulte más fácil manipularlos, yo los coloco de pie muy juntos en un cuenco, como se ve en la foto.
Poner la crema en una jeringa con boquilla de rellenar.
Cuando todos están rellenos, espolvorear con azúcar glas y colocar en el plato de servir.
Aprovechando bien esta cantidad de hojaldre, sale una docena justa de tirabuzones. Por el contrario, sobrará crema.
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