Esta receta la encontré en
La cuisine de Bernard y él a su vez la descubrió en la chocolatería
Blondel en Laussane. Estas finas planchas de chocolate, deben su
nombre de Chocolat au marteau a la forma de trocearlas con un golpe
seco. En algunos sitios las venden envasadas en cajas que incluyen un
martillito de madera.
Resultan unas chocolatinas
crujientes, riquísimas para tomar con el café.
Ingredientes
300
g de chocolate negro
120
g de azúcar
Poner
el azúcar en una sartén, calentar hasta que se forme un caramelo
claro. Extender sobre un tapete de silicona y esperar a que
cristalice. Cuando esté totalmente frío, triturar dejando trocitos.
Pasar
por un tamiz para eliminar el polvo. Reservar en un sitio seco.
Partir
el chocolate y poner en un cuenco resistente al calor. Para esta
receta es necesario templar el chocolate. Fundir al baño maría
hasta que alcance 44-45º, meter el cuenco en un baño de agua fría,
removiendo sin para hasta que baje a 29º. Poner otra vez al baño
maría hasta que suba a 31-32º. Ahora que ya se ha templado el
chocolate, mezclar con el caramelo y extender con una espátula sobre
un tapete de silicona. Debe quedar una capa delgada. Dejar que
endurezca por lo menos dos horas. Conservar en frío. Sacar del
frigorífico un rato antes de servir.
Una
vez partido, guardar en sitio seco, el caramelo expuesto al aire se
derrite con la humedad.
Etiquetas: bombones, chocolate