He
sustituido parte de la harina integral en la receta de pan de molde
que preparo habitualmente, por harina de avena. En realidad, he
triturado los copos de avena para convertirlos en harina.
Como
molde he utilizado unas latas grandes de conserva bien lavadas y
quitándoles todo resto de papel y pegamento de las etiquetas. El
resultado es un pan con la corteza tierna y unas rebanadas
perfectamente circulares. Se pueden preparar unas tostadas muy
bonitas o un sandwich que
abre el apetito al más desganado.
Ingredientes
500
g de harina de fuerza
200
g de harina integral
150
g de harina de avena
510
ml de agua templada
1
cucharadas de aceite de oliva
25
g de levadura fresca.
5
g de azúcar
15
g de sal
2
cucharadas de semillas de calabaza
1
cucharada de semillas de lino
Desmenuzar
la levadura en un poco de agua templada con el azúcar y esperar
hasta que esponje. Mientras poner los tres tipos de harina en un
cuenco, echar la mezcla de levadura en el centro, hacer una masa
blanda con la harina de los bordes y dejar reposar unos quince
minutos, añadir el resto de los ingredientes y amasar. Dejar reposar
10 minutos y amasar de nuevo, repetir al cabo de otros diez minutos.
Dejar
en sitio templado hasta que doble el volumen. Mientras, forrar el
fondo y las paredes de dos latas grandes con papel vegetal. Amasar
ligeramente y cortar dos trozos de unos 350 g, extender con un
rodillo y repartir las semillas. Formar bolas, ponerlas en las latas.
El resto de masa se pone en otro molde ligeramente enharinado.
Dejar
subir otra vez y cocer en el horno precalentado a 220º durante
30 minutos. Enfriar los panes en una rejilla para que no se
humedezcan.
Etiquetas: pan integral, panes especiales, semillas